martes, 29 de mayo de 2018

  TRAMO 4 BELORADO HORNILLOS 

     
    8/10/2005



       Salgo de Jerez a las cinco de la mañana, hacia Burgos, donde llego a las 14 horas, busco un lugar donde dejar el coche, lo que consigo en el aparcamiento de la Plaza de Vega, cerca de la Catedral. Después de cambiarme de ropa y coger la mochila, me dirijo a la Estación de Autobuses, que estaba al lado y en solo 30 minutos ya estaba subido al autobús que me llevaría a Belorado, lugar de mi partida, donde llego a las 16 h.
Belorado es una villa histórica y monumental, por lo que me dedico a pasear por sus calles y visitar sus principales monumentos, como la Plaza Mayor, con soportales y casas blasonadas, así como la Iglesia de Santa Maria, del siglo XVI, y la de San Pedro del siglo XVII, también la ermita de Ntra. Sra. de Belén, que fué un antiguo hospital. Encima de un cerro están los restos del castillo.

                                                            
                                                                

                                                         Ermita Virgen de la Peña

           Viendo que era temprano, decido ir a Tosantos, pueblo que está a unos cinco kilómetros y quedarme en el albergue parroquial. Llego al mismo a las 17 horas y me alojo en dicho albergue, Miguel el hospitalero me informa de las actividades para esa tarde, inmediatamente sin tiempo a cambiarme, subo con el resto de peregrinos guiados por una señora del lugar a la ermita rupestre de la Virgen de la Peña, excavada sobre un cerro a espaldas del pueblo.

           Luego más tarde a las 20 horas, preparamos la cena de hermandad entre todos los peregrinos, yo me encargué de trocear el pan y poner parte de la mesa, éramos en total dieciséis peregrinos, de los cuales solo tres eran españoles, el resto de diversas nacionalidades, pero no fué obstáculo para mantener conversaciones utilizando palabras sueltas, pero nos comprendíamos perfectamente, porque nos unía una meta que había que conseguir.

           Después de la cena el párroco nos invitó a unas oraciones en una estancia del albergue preparada con un pequeño altar improvisado, con algunas velas, y como final todos abrazados rezamos el padrenuestro, cada uno en su idioma. Es curioso que a estos actos participan todos aunque no sea la religión lo que a muchos les lleva al camino.




                                                                 
                                                           Albergue Tosantos

9.10.2005



          Me levanto a las 7.30 de la mañana, después de dormir en éste albergue de más de 300 años de antigüedad, aunque está restaurado, pero que deja al descubierto el entramado de vigas de haya, típica forma de construir en esta zona. Después de desayunar, empiezo a andar a las 8.20 , que ya se ve el camino. Es todo subida y no hace frío, al contrario de la tarde anterior, paso por el pueblo de Villambistia y más tarde por el de Espinosa del Camino, de donde sobresale la iglesia de la Asunción.

         Sigo mi subida camino de Villafranca Montes de Oca, antes de llegar al pueblo se puede ver los restos de un viejo monasterio, hoy convertido en capilla de San Felipe, también la ermita de Valdefuentes, cerca la Fuente del Carnero.

         A las 10.15, paso por Villafranca Montes de Oca, enclavado en un entorno natural bellísimo, visito la iglesia de Santiago Apostol del siglo XVIII y la ermita de Ntra. Sra. de la Oca.





           Después de reponer fuerzas , empiezo la subida y travesía de los Montes de Oca , lugar en donde eran asaltados los peregrinos en épocas remotas, iré alerta por si aún queda algún bandido suelto, es un tramo de gran dureza, hasta que se corona el puerto de la Pedraja, después es más asequible el camino, pero la dureza se olvida y se ve compensada por el paisaje, ya que todo el camino discurre entre hayedos y pinares, estos últimos de repoblación. Justo en el puerto conozco a un peregrino de canarias llamado Goyo y dos de Uruguay, con los cuales hago amistad para los próximos días, aunque la amistad y compañerismos se extiendo a todos los peregrinos que encuentras en el camino.

          Una vez franqueados los Montes de Oca, después de recorrer doce kilómetros entre bosques, llego a San Juan de Ortega. Este pueblo está apartado de las vías de comunicaciones, en él se encuentra el Santuario donde reposan los restos de dicho santo. Visito el santuario donde hace un frío sepulcral y repongo fuerzas en un bar cercano.  



                                                             
Montes de Oca


           En vista del mal estado del albergue, decido seguir caminando hasta el pueblo de Agés, donde llegué a las 16 h. Me alojo en un albergue estupendo, bastante cómodo, al tener el cuarto de baño dentro de la habitación, que comparto con un peregrino llamado Joan, un pagés catalán de la ribera de Ebro, de 72 años , con el que mantengo interesantes conversaciones sobre todos los aspectos de la vida, gracias a su experiencia por su edad, y fue hasta alcalde de su pueblo. Mas tarde visitando el pueblo conozco también a Xema, un joven estudiante catalán con los cuales compartiré camino los próximos días. 

          Aquí entro en contacto con peregrinos de Jerez, pero solo estaré con ellos esta noche, ya que no volveré a verlos . Después de cenar en un restaurante con el jerezano, xema y las bilbaínas Maria y Pili, nos fuimos a dormir.



10.10.2005 


          Desayuno en el albergue y empiezo a caminar a las 8.30 horas, a la salida de Agés contemplo el puente de un solo ojo, que se atribuye a San Juan de Ortega, después de andar tres kilómetros me encuentro el pueblo de Atapuerca, famoso por los hallazgos arqueológicos sobre el origen de la especie humana.

          Visito el pueblo y sigo por una fuerte subida por la Sierra de Atapuerca, cuando llego a las cumbres de la sierra, veo a lo lejos la ciudad de Burgos, pero aún me quedan muchas horas para llegar.



          Repongo fuerzas en Riopico Cerdeñuela a las 10.30, y sigo mi caminar pasando por los pueblos de Orbaneja,Villafría y Gamonal, donde la influencia de la capital se nota en sus construcciones . Después de atravesar autovías y vías de tren, todo indica que estoy cerca de la gran ciudad, el silencio del camino y el cantar de los pájaros, se cambian por el ruido de fábricas y motores.

          La entrada a Burgos se hace interminable, por el barrio de Gamonal, una acera de cerca de diez kilómetros, por el centro de un polígono industrial, con un tráfico enorme de camiones y la consiguiente contaminación, pero la fuerza de voluntad del peregrino puede con todo, sobre las 14 horas, llego por fin al casco histórico de Burgos, entrando por la calle de las Calzadas o "concheiros", como se conoce popularmente. Antes en una plaza está la Iglesia de San Lesmes, patrón de Burgos.


                                                               
                                                                    Burgos

          Una vez pasada la puerta de la ciudad antigua, se sigue por varias calles hasta llegar a la catedral, que me saluda con su imponente porte. Sigo por varias calles hasta salir de la ciudad por la Puerta de San Martín, en busca del albergue, que se encuentra en el centro de un parque, después de inscribirme , me voy a comer al comedor de la Universidad que está cerca, donde los peregrinos son bien acogidos.

          Más tarde en compañía de Xema y otros peregrinos, nos vamos al centro de la ciudad, visitando la Catedral, la Plaza Mayor y la Avda. del Cid.

           La Catedral es el monumento mas representativo de Burgos, un impresionante obra del gótico florido. Visito las distintas capillas y el museo de la catedral, así como el sepulcro del Cid. Entre sus puertas destacan por su belleza arquitectónica la de la Pellejeria, la Sacramental y la de la Coroneria, las agujas del templo son de Juan de Colonia.
El resto de la tarde la comparto con varios peregrinos canarios.





11.10.2005


          A las ocho de la mañana, salgo de Burgos, pasando por delante del Hospital del Rey, con su puerta plateresca, muy cerca está el Monasterio de las Huelgas Reales, con su iglesia monacal y claustro.

          Esta mañana me acompañan un asturiano y otro catalán, con los cuales caminaría todo el día. Pasamos por el pueblo de Villalbilla, y a las 10.15 h. llegamos a Tardajos, donde reponemos fuerzas y volvemos a encontrar a las bilbaínas Mari y Pili. Seguimos hasta Rabé de la Calzada, precioso pueblo de casas blasonadas, pueblo que fue cedido por Alfonso VI, con el fin de que con sus rentas se sustentara la albergueria del Hospital del Emperador.

         A continuación se asciende por la cuesta de Matamulos, una fuerte subida, que más tarde se suaviza, y después de ocho kilómetros se llega a Hornillos del Camino, pueblo que conserva su trazado urbanístico jacobeo. Destaca su iglesia de Santa Maria, justo al lado está el albergue municipal, donde me quedo, llegando a las 13.30 h. Aquí se despiden de mi el asturiano y catalán que iban a seguir camino, y soy atendido por el hospitalero, que no es otro que el alcalde del pueblo.



                                                                       
                                                          Hornillos del Camino

          En éste albergue me vuelvo a encontrar a Joan y las peregrinas bilbaínas, después de cenar en el albergue todos juntos, siguió la velada animadamente acompañándonos el alcalde y un vecino del pueblo, Joan se arrancó por jotas y habaneras, por algo pertenece al coro de su pueblo, y Maria nos cantó unas canciones populares en euskera, aunque antes nos la traducía , siendo canciones muy sentimentales. Después de disfrutar de la convivencia nos fuimos a la cama.




TRAMO  3  LOGROÑO-BELORADO



           Dia 12/10/2004



Después de atravesar la ciudad por su parte vieja y algunas zonas nuevas, salgo de ella por el parque de la Grajera, en donde me empieza a llover y tengo que recurrir a la ropa de agua, éste parque debe tener como seis kilómetros y es utilizado como vía verde por los logroñeses. Paso junto al pantano de la Grajera, en donde observo patos, fochas y gran cantidad de carpas. Al final del parque empieza una fuerte subida durante mil quinientos metros, deja de llover y me desprendo de la ropa de agua que tanto molesta al andar.

Superada la pendiente se pasa por un pequeño puerto, donde el camino va paralelo a la autovía Logroño-Burgos, y observo que la valla de tela metálica que protege a la autovía, esta llena de cruces, confeccionadas con palitos y ramas entrelazadas en la tela metálica, hay miles y miles de cruces, durante casi un kilómetro, es la forma de dar testimonio de su paso de miles de peregrinos o de su fe.

Después de tantas subidas y bajadas, sobre las 14 horas, llego a Navarrete y me quedo en el albergue, situado en un edificio antiguo, la hospitalera me dice que hay una cena colectiva para los peregrinos, pero la hora de la cena, las 7.30 de la tarde, no me convence, ya que a esa hora meriendo en mi tierra, fui a cenar a horas más española y andaluza, luego sí compartí un rato con los demás en el salón del albergue, hasta la hora de dormir.

                                                                   


Albergue de Navarrete

Antes de entrar en Navarrete, se ven las ruinas del hospital de peregrinos de San Juan de Acre, la portada románica y dos laterales, fueron reutilizados en su día, como puerta del cementerio del pueblo, en donde la podemos admirar a la salida del mismo. También visito la Iglesia de la Asunción, del siglo XVII, el monumento al alfarero y la antigua alhóndiga.


Día 13/10/2004


Salgo de Navarrete a las ocho después de desayunar, el camino sigue entre viñedos interminables, dejo el pueblo de Ventosa a lo lejos, y sigo por falsos llanos, ya que me dirijo a la provincia de Burgos, que está a 800 m. sobre el nivel del mar y Logroño a 380 m.

En una mañana fría recorro hasta 16 kilómetros sin pueblos hasta llegar a Nájera. Antes de llegar a este pueblo se sube una pequeña elevación por restos de una calzada romana, donde también el peregrino deja


sus huella, miles de hitos compuestos por piedras superpuestas y en un equilibrio increíble algunas, jalonan esta calzada en su parte más alta. Cerca ya del pueblo encuentro a gente vendimiando y una pintada en una casa me recibe con "Peregrino en Nájera, najerino".

Un poco antes de entrar también encuentro el Poyo de Roldán, que evoca la mítica victoria de Roldán frente al gigante musulmán Ferragut. Este gigante de siete brazas de alto, una nariz de un palmo y 200 kilos de peso, se abalanzó sobre Roldán y lo inmovilizó con su peso, pero Roldán el clavó su puñal en el ombligo, acabando con él. Así Carlomagno pudo liberar Nájera.

                                                                        

                                 Poyo de Roldán Santa Maria la Real (Nájera)


Llego a Nájera a las 11 horas y atravieso la ciudad vieja que está arropada por una peña de tierra color bermellón, este pueblo está atravesado por el río Najerilla. Visito sus monumentos y plazas. Entre ellos el Monasterio de Santa Elena, del siglo XVII y la Iglesia Monasterio de Santa Maria de la Real, iglesia fortaleza, donde se encuentra el panteón real de los Reyes de Navarra. Sigo el camino por una fuerte pendiente entre pinos, después de subidas y bajadas, llego al pueblo de Azofra a las 13 horas. Me dirijo al albergue municipal,


que es el mejor que he visto hasta ahora en comodidad y equipamiento, ya que fue inaugurado en junio de este año.

Después de comer y descansar, junto a Nathalia, una peregrina de Montreal, visito la iglesia y la Fuente de los Romeros.

       Día 14/10/2004


Desayuno y emprendo el camino a las ocho, cerca de la salida de Azofra, encuentro el Rollo de Azofra, es un monumento en forma de espada clavada en la tierra, que en la edad media avisaba a los malhechores de la justicia. Después de andar casi quince kilómetros entre campos de cereales, paso cerca del pueblo de Ciriñuela, pero no se entra al estar el camino desviado por unas obras, sigo el interminable camino hasta llegar hacia las 11 de la mañana a Santo Domingo de la Calzada. Visito la catedral románica, donde está el sepulcro de Santo Domingo, también veo el gallinero construido en 1460, en donde siempre hay un gallo y una gallina vivos, que recuerdan el milagro del gallo y la gallina que cantaron después de asados.

                                                                             

                Catedral Santo Dgo. de la Calzada



En el siglo XIV, un matrimonio francés que peregrinaban a Santiago con su hijo, se hospedaron en el mesón del pueblo, y una moza tienta a su hijo, pero éste la rechaza, en venganza la moza esconde una copa de plata entre las ropas del muchacho y lo denuncia por robo, es aprendido y ahorcado. Al regresar de Compostela, los padres encuentran aún vivo a su hijo, rápidamente se dirigen a donde el Corregidor de la villa, que se disponía a dar cuenta de un gallo y una gallina asados. El Corregidor les contesta que su hijo está tan muerto como las dos aves que se iba a comer, en ese momento los animales saltan del plato y comienzan a revoletear y cantar, probando la inocencia del joven ajusticiado.

Entre otros monumentos está el Monasterio de Ntra. Sra. de la Anunciación, el Convento de San Francisco y las murallas.

Repongo fuerzas en un bar de la calle Mayor y sigo el camino hasta llegar a Grañón hacia las 14 h. Me alojo en el albergue parroquial , es medieval y está adosado a la iglesia. Consta de un salón con chimenea y en la buhardilla sobre suelo de madera unas colchonetas para dormir, la zona de fregaderos y tender ropas, es sobre
las buhardillas de las cúpulas de la iglesia, menos mal que los servicios y duchas eran del año 2000.  



                                                   

Camino a Santo Domingo de la Calzada



Esta noche ceno en el albergue en convivencia con los demás peregrinos, la comida preparada por un peregrino de Tenerife que ya acababa hoy, con las existencias del albergue consistía en judías pintas con chorizo y morcilla, también hicimos unas ensaladas, patatas aliñadas y postre de gelatina, así como "papas arrugas", al estilo canario con mojo picon. Esto es una parte esencial del camino, como personas de distintas nacionalidades, con diferentes idiomas y razas, se unen para comer juntas, colaboran todas en el éxito de la cena y solo tratan de ayudarse unas a otras, todas con la misma idea de llegar hasta Santiago. Después de los postres
, la hospitalera que era de Canadá, nos invito a visitar el coro de la iglesia hacia las 11 de la noche, con el altar al fondo iluminado, nos sentamos cada uno en un banco barroco del coro y se leyeron oraciones en varios idiomas por los peregrinos. Luego cada uno dijo hasta donde se comprometía a llegar, que quedaba como una promesa en el libro de registros del albergue. Muchos hasta Santiago y otros como yo, hasta donde me diera tiempo dentro de la semana que tenia.


Después de este acto protocolario, que gusto a unos y a otros no, según sus creencias, nos acostamos tarde por primera vez en un albergue. Como curiosidad diré que había gente de Canadá, Islandia, Alemania, Venezuela, Italia, Brasil, Francia, Inglaterra, España, y solo éramos unos veinte.





                                                                      



                                                          Cena Albergue de Grañon











             Día 15/10/2004




Hoy es mi último día de peregrinación, pues se me acaba el tiempo de que disponía. Salgo de Grañón a las ocho, como siempre, y sigo el camino hasta Redecilla del Camino, primer pueblo de la provincia de Burgos, desayuno en el albergue y visito la Iglesia Parroquial Ntra. Sra. de la Calle, del siglo XVIII, en donde está una pila bautismal románica del siglo XII, una pieza única en el camino.

Esta etapa discurre bastante distraída, pues hay un pueblo cada pocos kilómetros, aunque un poco dura, por el aire frío que azota de frente, atravieso el pueblo de Castidelgado, y más tarde Viloria de Rioja, y su iglesia de San Andrés, del siglo XVI, en éste pueblo nació Santo Domingo de la Calzada. Un poco más tarde atravieso


Villamayor del Río y sobre las 13 h. llego a Belorado, meta final de mi peregrinar y donde empezaré a andar la próxima vez que tenga tiempo.

Acabo de terminar y ya tengo ganas de reanudar el camino que me llevará hasta Santiago.

Después de visitar el albergue de Belorado, la Iglesia de Santa Maria, del siglo XVI, emprendo la vuelta en autobús a Logroño, en donde vuelvo a coger otro hasta Villatuerta, donde llego hacia las seis de la tarde. Esta misma tarde regreso a casa, haciendo escala en Madrid, al otro día llegue a las 13.30 h. con todas las experiencias y vivencias que me dio estos días inolvidables.

jueves, 1 de marzo de 2018

Video Camino Portugués 2016
TRAMO 9 - PORTOMARIN-SANTIAGO



9/10/2007


              Llego a Portomarin, a las doce del mediodía, y busco un lugar donde dejar aparcado el vehiculo y lo dejo al lado de una tienda de comestibles, ya que el dueño amablemente se ofreció a vigilarlo durantes los días que allí estuviera. Enseguida empiezo a caminar por tierras gallegas, atravieso el río Miño, por una pasarela de bastante altura que han construido para el paso de peregrinos y empiezo una larga subida entre frondosos bosques de robles y eucaliptos.

              El terreno me hace notar que ya camino por tierras gallegas por sus continuas subidas y bajadas y los hórreos salpicando el paisaje, paso por Gonzar, donde el monumento más importante es la parroquia de Santa Maria, son las 14 horas y me paro a comer.

Mas tarde paso por Castromayor, pequeña localidad, y al poco tiempo por Hospital de la Cruz, donde se situaba un hospital de peregrinos en la antigüedad, estos pueblos como es típico en Galicia, están muy cerca unos de otros, después de seguir subiendo, llego a Ventas de Narón hacia las 17.30 horas.



Ermita Ventas de Narón


          Me quedo en el albergue de Ventas de Narón, siendo el único peregrino que lo usa esta noche, y por tanto estaré muy cómodo sin oír ronquidos y sin que nadie me despierte temprano.

          Este enclave fue importante en el camino en otros tiempos, era un alto en el camino, antes de cruzar la sierra de Ligonde y lugar de transacciones comerciales, a las afuera está la capilla de la Magdalena, que puede ser el indicio de la existencia de un antiguo hospital de peregrinos.

Luego de cenar en el bar del mismo albergue, me acuesto.

10/10/2007


        Me levanto a las ocho y media y después de desayunar emprendo el camino, que sigue subiendo la sierra de Ligonde. Al poco tiempo me encuentro con el cruceiro de Lameiros, cuando el sol se desliza entre las ramas de los robles que lo rodean.

        Llego a Ligonde, que antaño fue una importante estación jacobea, donde aún se conserva un cementerio de peregrinos, anexo a un desaparecido hospital de la Orden de Santiago. Su iglesia de Santiago, neoclásica, conserva la portada románica de su antecesora. Después de vadear un arroyo en dirección a Eireche, está la casa de MariLuz, que prepara comidas para los peregrinos.



Cruceiro de Lameiros



            Eireche es una pequeña aldea, con una iglesia románica, rodeada de tumbas como es típico de esta tierra. Luego de pasar por la aldea de Avenostre, llego a Palas de Rei a las
12.15 h. donde la existencia de castros celtas nos da una idea de su remota existencia. También está 
emplazada en la calzada romana Lugo-Astorga. Era un lugar importante en la edad Media, donde se reunían los peregrinos a fin de hacer los últimos tramos de la ruta jacobea.

           Actualmente es un pueblo grande que desconcierta un poco con sus ruidos, después de pasar por muchas aldeas en donde solo se escuchan los pájaros. La iglesia de San Tirso, con su portada románica es el único vestigio de su pasado histórico. Despúes de tomar un refresco salgo de Palas de Rei, por el Campo de Romeiros hacia San Xulian del Camino, en donde según la leyenda un noble soldado que dio muerte a sus padres por error, para purgar sus pecados se establece como hospitalero con su esposa Adela, hasta que la visita de un ángel, le comunica el perdón divino.

           Más tarde paso por el pequeño pueblo de Casanova, es el último pueblo habitado de la provincia de Lugo. En el cercano puerto de Bois tuvo lugar una cruenta batalla entre Enrique de Trastamara y el Conde de Lemos Fernán Ruiz de Castro, fiel al monarca Don Pedro I el cruel. La suerte se inclinó de parte de los Trastamara.

           Una calzada romana me lleva hasta Leboreiro, primer pueblo de la provincia de La Coruña, el nombre se debe a la abundancia de liebres. También fue una importante estación jacobea en la Edad Media. La iglesia de Santa Maria es de estilo románico de transición , aquí veo por primera vez los típicos cabazos, un granero en forma de gigantesco canasto, como si se tratara de un primitivo hórreo.




Leboreiro





          Abandono el pueblo por un puente reconstruido y llego a Furelos, antesala de Melide, donde llego a las 18 h. y donde me quedaré esta noche en su albergue. Es un pueblo atravesado por la carretera nacional Lugo-Santiago, es de origen prerromano y está situado en la vertiente occidental de la sierra de Careán. Me llama la atención los miles de estorninos que duermen en los árboles de la plaza, que al anochecer producen un sonido ensordecedor.

          En Melide, no podía pasar sin probar su plato más típico junto a un peregrino de Murcia, degustamos este riquísimo plato,en la mejor pulpería de la zona , Casa Ezequiel, doy unas vueltas para       digerir el plato y me voy a dormir.
     



11/10/2007


             Salgo de Melide, a las ocho horas, después de varias subidas, paso por la aldea de Boente, que está a la orilla de la carretera nacional, empezando aquí una serie de toboganes que durarán hasta Arzua, un rompe piernas para el caminante. Mas tarde paso por la aldea de Castañeda y cruzo el río Iso y entro por un puente medieval a Ribadiso da Baixo. Y después de una larga subida llego a Arzua a las 13.30 h. y fin de jornada, hoy solo he hecho quince kilómetros, pero prefiero descansar el resto del día, preparándome para la etapa de mañana.

            Arzua, es una localidad moderna y grande, que también atraviesa la carretera nacional, con el consiguiente ruido, en la parte antigua se encuentra el antiguo convento de la Magdalena, fundación agustina del siglo XIV, que mantuvo un albergue para peregrinos pobres y que hoy está en ruinas.






12/10/2007


           Me levanto más temprano que de costumbre, me espera una larga etapa de 35 kilómetros, que confío en poder hacer de Arzua a Monte do Gozo. Desde aquí se piensa que Santiago está al alcance de la mano y hay nervios entre los peregrinos y a la vez sensación de paz de poder concluir por fin un sueño.

            El terreno sigue igual, constantes subidas y bajadas, entre pequeños pueblos y aldeas que hacen ameno el camino. Después de once kilómetros se llega a la aldea de Salceda, antes había pasado por el caserío de Pegontuño, luego por los de Calzada, Calle y Boavista, que también son pequeñas aldeas sin ningún tipo de servicio al peregrino.






12/10/2007

 

             El camino discurre entre frondosos bosques de eucaliptos, pinos y robles, unas ardillas se asustan a mi paso y suben a los árboles con su ruido característico. Después de bastantes kilómetros, alternando cruce de bosques con la carretera nacional, paso por la aldea de Brea, y empiezo a darme cuenta que va a ser difícil comer hoy, ya que no encuentro ningún bar ni restaurante en éstas aldeas.

 

             A las 12.20 h. llego a Santa Irene, después de un acusado descenso, cada descenso te asegura que luego vendrá una subida, que pondrá a prueba tu resistencia, pero así es ésta tierra. En este pueblo hay una pequeña capilla que la santa mártir portuguesa tiene dedicada y que data del siglo XVIII. Más tarde paso por la aldea de aspecto medieval de Rua, llegando a Arca do Pino sobre las 14 h. pero solo encuentro un bar que solo sirve bebidas, por lo que tengo que echar mano de mis reservas de frutos secos para terminar esta larga etapa.

 

San Paio

 

 

 

            Descanso un rato y sigo mi camino entre bosques y solanas, paso por la aldea de San Paio y me enfrento a los siguientes diez kilómetros de camino siempre en subida que me llevarán hasta Labacolla. Ya se nota la larga etapa y el calor es insoportable, teniendo el sol de frente en las subidas. El último tramo antes de llegar a Labacolla, se nota ya la gran ciudad de Santiago, ya que se cambian los bosques por las pistas del aeropuerto, que tengo que rodear, en medio de carreteras y autovías.

 

             Pasado el pueblo de Labacolla, llego a San Marcos, que está junto al Monte do Gozo, llamado así porque es la primera vez que el peregrino ve en el horizonte Santiago. Estoy un rato en el Monte do Gozo y me dirijo al albergue que está al lado. Es un enorme complejo con 30 pabellones para alojar peregrinos, es una pequeña ciudad con su plaza, con restaurantes y servicios.

 

            Me alojo en el pabellón 27, habitación 457, donde conozco a un peregrino alemán y otro de Barcelona, llamado Joan, después de cenar me acuesto enseguida para estar descansado para el gran día.

 

Monte O Gozo

 

13/10/2007

 

               Me levanto a las ocho de la mañana y desayuno en Monte do Gozo con Joan. Nos queda 4.5 Kms. para llegar. Este último tramo es estresante, ya que discurre entre carreteras, polígonos industriales, autovías y calles de las afueras , donde se nos unen miles de turistas que salen de los hoteles cercanos.

 

              Dejo a Joan, seguir solo, porque lleva un ritmo rápido y quiero saborear mi entrada en Santiago despacio solo con mis pensamientos. Voy recordando lo que ma ha costado llegar hasta aquí, empecé en el año 2003 a realizar tramos del camino, siendo el primero el de Ponferrada-Portomarín, más tarde empecé en Roncesvalles y he ido haciendo tramos hasta hoy que llego a la meta.

 

             Recuerdo lo mal que lo pasé la primera vez , terminé todo dolorido y con lumbagia. Recuerdo los días de frío y viento, que casi no me dejaban caminar, los días de lluvias, que me empapaban por dentro por el sudor y por fuera por el agua, los días de fiebre por éstos enfriamientos, las enormes ampollas que me produjo una mochila nueva que estaba desequilibrada, los días de gastroenteritis que me obligaron volver a casa antes de tiempo, las noches donde no podía dormir por el cansancio, los quince mil kilómetros que he hecho con el vehículo para volver cada vez al camino, la cantidad de personas de todas las nacionalidades que conoces, los amigos que haces en el camino con los cuales después sigues en contacto, Recuerdo a mi amigo Miguel y Antonio, que me acompañaron en distintos tramos, las conversaciones que he tenido con la gente de los pueblos, la solidaridad de los peregrinos que al verte con dificultades te ofrecen ayuda, la gastronomía de cada región, pueblo y zona.

 

            Veo que se me termina los días de prados, ovejas, literas, solana, barro, conversación, auto conocimiento, misticismo, religiosidad, emociones, cereal, viñedos, bosques, sopa de ajo, sandalias, idiomas indoeuropeos, ampollas, piedras, vidrieras, arbotantes, arquivoltas, cruceiros, colacaos, tiritas, botas, subidas, enormes rectas, bajadas duras, sacrificios, empeños, olor a reflex, ronquidos, mensajes en el móvil animándome.

 

             Y sin darme cuenta en mis pensamientos de pronto me encuentro en la Plaza de las Platerias, por fin había llegado.

 

             Después me dirijo a la Plaza del Obradoiro, donde quedo de pie y con mi mochila en un estado de paz y satisfacción enormes, mirando la fachada de la Catedral, estaba rodeado de gente, pero me sentía solo.

 

            Esta iglesia es del siglo XII, del año 1128, donde se combinan estilos románicos, con elementos renacentistas y barrocos. Luego visito por dentro la Catedral, realizando las típicas acciones de los peregrinos, visitando la tumba del santo y abrazando la imagen del mismo.

 

            Salgo otra vez a la Plaza del Obradoiro y me encuentro con Joan y otro peregrino alemán que juntos habíamos hecho las ultimas etapas, nos felicitamos y abrazamos, por haber conseguido llegar al final.

 

            Estoy seguro que los miles de turistas que hay en la plaza en esos momentos, no saben lo que nos costó llegar hasta allí, después de 750 Kms. y al fuerza de voluntad que tuvimos que poner para llegar.

 

            Me acerco a la oficina del peregrino, en la Plaza de las Platerias, donde me dan la Compostela o certificado que otorga el obispado como que has realizado la peregrinación , después de comprobar la credencial, donde figura todos los sellos de los albergues que has pasado desde Roncesvalle.

 

 

 La meta

 

               Luego paseo un rato por las calles de Santiago, que son de enorme belleza, más tarde decido ir a la estación de autobuses para empezar el regreso a casa, parto a las 13.30 h. hasta Lugo y desde allí subo a otro autobús que me lleva hasta Portomarin. Allí recojo el coche y empiezo el viaje de vuelta, cuando llevo quinientos kilómetros, hago noche en un hostal de Hervás (Salamanca) y llego a casa el día 14, a las 14.30 h.

 

              El Camino de Santiago, una experiencia inolvidable y única, que cambia en muchos aspectos a las personas