TRAMO 8 - ASTORGA-PORTOMARIN
6/10/2007
6/10/2007
Salgo de Jerez, a las seis de la mañana, después de recorrer una vez más la Ruta de la Plata, llego a Ponferrada a las 14 h. Compruebo que cada día hay más peregrinos haciendo la Ruta de la Plata, desde Sevilla a Santiago.
Una vez en Ponferrada, me dirijo al albergue de
peregrinos, donde dejo aparcado el coche y entro en contacto con la
hospitalera, a la que doy la matricula de coche, por seguridad.
Inmediatamente me dirijo a la
estación de tren, que está bastante lejos, y pregunte por los horarios para
Astorga y como faltaban horas, me voy a la estación de autobuses, a ver si
había mejor combinación, pero volví a la de tren, que por el horario me venia
mejor, total casi seis kilómetros por la ciudad con un calor sofocante.
A las 16.30 horas, subo al tren
que me llevará hasta Astorga, donde llego a las 18.20 h. enseguida me dirijo al
albergue, donde ya estuve la última vez.
7/10/2007
Apuro la hora de levantarme, y a
las ocho de la mañana empiezo a caminar en plena comarca maragata. Empieza el
camino con sendas cómodas, bordeadas de brezos y otros arbustos, pero pronto me
doy cuenta que tengo delante los Montes de León, que seguro me ofrecerán
dificultades.
A la salida de Astorga, paso por
Valdeviejas, en el camino una ermita que afea un transformador puesto justo al
lado de la misma por un ingenioso arquitecto, y llego a Murias de Rechivaldo,
pequeña aldea cerca de Astorga, y aquí empieza la subida que no cesará en dos
días, hasta alcanzar casi los 1500 m. de altitud. A lo lejos veo el pueblo de
Castrillo de Polvazares, es la población mas representativa de la comarca
maragata, que está declarado conjunto histórico-artístico y que alcanzó su
esplendor en el siglo XVIII.
Valdeviejas
Cerca de las 10.30 h. paso por
Santa Catalina de Somoza, atravesando su calle Real, de su antiguo Hospital de
la Virgen de las Candelas, ya no quedan restos.
Sigo la subida constante hasta la
localidad de El Ganso, éste pueblo es como el anterior, solo resucita un poco
con el paso de los peregrinos durante el verano, luego casi quedan desiertos, aquí
se pueden ver aún casas con los tejados de paja, construcciones que se remontan
a la prehistoria, que demuestran el substrato celta de esta extensa zona, en su
iglesia parroquial, dedicada a Santiago, se puede contemplar una bonita talla
del Santo, vestido de peregrino del siglo XVI.
Sigue la subida y llego a Rabanal
del Camino, a las 14 h. fin de la etapa de hoy. Me alojo en el albergue de
Santiago, de titularidad alemana, entre los veinte peregrinos que hacen uso de
este albergue, soy el único español, con el consiguiente problema de idiomas.
Por la tarde me dedico a recorrer el pueblo, ejemplo de las construcciones
maragatas. Junto al albergue hay un monasterio de reciente creación bajo la
advocación de Santa Otilia de Munich. Por la noche hace bastante frío y me
acuesto enseguida.
Rabanal del Camino
8/10/2007
Esa mañana hace frío, y a las ocho
empiezo esta etapa que es bastante dura, ya que se inicia con la subida al
monte Irango. Llego a las 9.30 horas a Foncebadón, en medio de una intensa
niebla, y voy descubriendo en medio de la misma los restos de lo que fue en su
día una importante localidad del camino. Ahora solo queda un hostal, donde
desayuno y hablo bastante con el dueño, que había trabajado en mi tierra. Sigo
el camino en medio de bosques de repoblación de pinos, subiendo continuamente
hasta llegar a la Cruz do Ferro, lugar donde durante siglos los peregrinos
arrojaban piedras para pedir protección en el viaje. Yo deposito una piedra
traída desde Jerez y formulo mis deseos. Al lado hay una ermita dedicada a
Santiago, de construcción nueva.
Foncebadòn
Ya, en plena bajada paso por el pueblo abandonado de
Manjarin, donde solo vive Tomás el hospitalero, que en su cabaña atiende a los
peregrinos. Después sigue la bajada muy pronunciada que hace poner a pruebas
las piernas, veo unos castaños enormes que jalonan el camino. Desde hace rato
me había quedado sin agua y ya empezaba a tener bastante hambre, paso al lado
de una base militar y después de bajar hasta los 1150 metros, diviso al fin el
pueblo de El Acebo, con sus tejados de pizarra, atravieso por su calle Real,
llena de balcones de madera con flores, y por fin puedo comer en un mesón en
plena calle Real.
Después de descansar un rato, sigo
el descenso hasta el Riego de Ambrós, población que aparece desierta, pero que
se nota que es utilizada los fines de semana por gente de la cercana
Ponferrada.
De este pueblo se baja por una
calzada romana, excavada en roca, y por pendientes cada vez mas fuertes hasta
la localidad de Molinaseca, he bajado de los 1500 m. de la Cruz de Ferro a los
590 m. de altitud de este pueblo, las piernas dan fe de ellos del esfuerzo
realizado.
A Molinaseca llego a las 18 h.
después de esta dura etapa, entrando al pueblo por un puente románico, sobre el
río Meruelo, atravieso el pueblo típico de los montes de León , y en las
afueras encuentro el albergue donde me quedaré hoy. Por la noche cené y dimos
un paseo por esta pintoresca población, con un peregrino de Bilbao.
Cruz de Ferro
9/10/2007
Me levanto a las ocho de la mañana,
como todos los días, aunque hoy será especial, ya que pronto todas las
amistades que había hecho estos días, las iba a perder de vista. Después de
desayunar, ando los 8 kilómetros que me separan de Ponferrada, donde llego a
las 10 de la mañana, donde termino este primer tramo del día, recogiendo el
coche que me llevará hasta Portomarín, donde reanudaré la marcha.
19/09/2003
Salgo de Jerez a las 7 h. , después
de un largo viaje por la Ruta de la Plata, llego a Ponferrada a las 17 h.
Una vez localizo el albergue de peregrinos, entro en contacto con el
hospitalero, que me da toda clase de facilidades, me expide la Credencial del
Peregrino y me aconseja donde dejar el coche, justo detrás del albergue.
Este albergue está considerado con uno de los mejores de la ruta jacobea.
El resto de la tarde lo dedico a visitar la ciudad, su castillo templario y
casco histórico. Después de cenar vuelvo al albergue, allí el
hospitalero me presenta a un peregrino de Pozoblanco (Córdoba), llamado Pedro,
con quien andaría buena parte del camino, A las 22 h. todo el mundo a dormir,
es hora temprana para mí, pero se agradece después del largo viaje.
Ponferrada
20/09/2003
A las 7 h. una música de cantos gregorianos, nos anuncia que es
hora de levantarse. Junto con Pedro inicio el camino saliendo de Ponferrada por
la N-VI, recorriendo varios kilómetros sin dejar ésta carretera, a las 8 h.
desayunamos y seguimos hasta llegar al pueblo de Camponaraya.
A partir de éste pueblo el camino deja la carretera y se adentra en un terreno
de viñedos, con continuas subidas y bajadas, mas tarde pasamos por los pueblos
de Cacabelos y Piero, llegando hacia las 13.30 h. con mucho calor a Villafranca
del Bierzo. Este paisaje serrano es más bonito, que el dejado
atrás. Me instalo en el albergue municipal y con varios compañeros que
hice amistad, visitamos después de comer el pueblo, con bastantes casas palacios
e iglesias.
21/09/2003
Salgo de Villafranca del Bierzo, a
las 7 h. el camino esta vez discurre por el arcén de la antigua N-VI, aunque
está protegido por un murete de hormigón de la calzada, ahora caminamos un
grupo compuesto por Pedro, y cuatro más de Málaga, Madrid, Tenerife y
Zaragoza. Son casi quince kilómetros de arcén bastante aburridos,
desayunamos en el pueblo de Pereje. Poco después por fin dejamos la
carretera y seguimos hacia el pueblo de Trabadelos, pasando por las aldeas de
La Portela y Ambasmestas. A partir de aquí camino solo, hasta
llegar al pueblo de Vega de Valcácer, durante bastante tiempo voy junto a una
chica de Jaén, que trabaja en Logroño, ella decide quedarse en éste pueblo, al
estar agotada.
Cacabelos
Sigo
adelante pasando por las aldeas de Ruitelán y Herrerias, en ésta última repongo
fuerzas al mediodía. A partir de aquí se empieza la subida al puerto de O
Cebreiro, antes había aligerado la mochila de todo lo que creía que
me sobraba tirando todo a un contenedor, al ser la primera vez que hacia el
camino, no tenia experiencia en limitar el peso de la mochila.
Empiezo a subir el puerto por una calzada romana bastante deteriorada y con un
calor tremendo, más tarde empezaría a estropearse el tiempo y decido quedarme
en el albergue de La Faba. Esperaba encontrar aquí el resto del
grupo como habíamos quedado, pero habían seguido adelante. El
albergue es estupendo y tiene hasta desayuno bufett incluido.
Este había sido construido por un peregrino alemán al cumplir una promesa que
hizo, si sobrevivía a una tormenta en los pirineos. Al lado
hay una iglesia románica que también será restaurada por esta misma
persona. Para cenar fui al único bar de ésta aldea
de ocho familias en total, cené gracias a que me dieron de comer de la olla de
la familia, eran lentejas bastante buenas.
Alberque la Faba
22/09/2003
Amanece lloviendo, a las 7 h. desayuno en el mismo
albergue, después tengo que esperar casi media hora para que amanezca un poco
más, ya que era completamente de noche sin ninguna visibilidad.
Continuo la subida al puerto por el interminable camino romano.
Después de una hora y bajo la lluvia, llego al hito que marca el limite de
Castilla-León con Galicia, como no podía ser de otra forma llego a Galicia
lloviendo que es lo suyo.
Limite Castilla León-Galicia
Siguiendo
el camino por las cumbres, se pasa por la aldea de Laguna de Castilla y sobre
las 9.30 h. llego al O Cebreiro, donde después de cambiarme la ropa mojada,
repongo fuerzas al calor de una chimenea.
Una vez pasado el puerto, se inicia el descenso nuevamente por el arcén de la
antigua N-VI, al comiendo del descenso existe una escultura enorme en bronce de
un peregrino oteando el horizonte en busca de Santiago.
Paso por la aldea de Liñares, y más tarde se empieza a subir hacia el Alto de
Poio, otro puerto de montaña con bastante dificultad. Al pasar por el
pueblo de Hospital de la Condesa, me tomo una sopita caliente en compañía de
dos peregrinas alemanas, para combatir el frío. Luego se atraviesa
el pueblo de Padornelo y se sigue por una serie de aldeas primitivas, llenas de
vacas y excrementos de las mismas por todos lados, estás son Fonfria, Biduelo,
Filoval, As Pasantes y Ramil.
Hacia
las 16.30 h. y bajo la lluvia, llego al Triacastela, al llegar al albergue me
encuentro el grupo de peregrinos, incluido Pedro que hacia un día, había
perdido contacto. Por la tarde me dedico a visitar los monumentos de éste
pueblo, y por fin pruebo el pulpo a la gallega, que tantas ganas tenia desde
que llegué a Galicia
23/09/2003
23/09/2003
A las 7.30 empiezo a caminar, después de desayunar, salgo
de Triacastela, se pueden seguir dos caminos diferentes, uno que va a Sarriá
directamente y otro que pasa por Samos, donde hay un monasterio benedictino,
pero como la ruta histórica es la primera, es la que sigo.
Hace bastante frío ésta mañana y caminando por una carretera
comarcal con bastante subida, se llega a la aldea de San Xil, luego el paisaje
es bastante bonito pero con continuas subidas y bajadas, atravesando las aldeas
de Montán, Furela, Pintín, Calvor, Aguiada y Vigo de Sarriá.
Ya se hacen más presente los hórreos y vacas por todos lados. Desde el
alto de una loma diviso Sarriá, pero aún tardaría en llegar dos horas, sobre
las 14 h. llego a este pueblo bastante grande y me alojo en el albergue en
pleno centro histórico. Por la tarde visito el pueblo y cené en compañía de dos
peregrinos de Argentina.
Sarriá es el punto de partida de
muchos peregrinos, ya que es la mínima distancia que se exige para la obtención
de la Compostela.
24/09/2003
Me levanto a las 7.45 h. antes de salir de Sarriá, visito un
monasterio benedictino de estilo románico. El camino sigue por los altos
de unas colinas, contemplándose un bonito paisaje gallego al amanecer, se
atraviesa las aldeas de Vilei, Rente, Xisto, Domiz, Perascullo, Leiman,
Cortiñas, Lavandeira, Casal, Brea, Mirallos, Pena, Couto, Moimentos, Moutras,
Mercadoiro, Vilacha y Parrocha, cantidad de aldeas ancladas en la edad media y
que viven todas de lo mismo, del vacuno.
Sobre
las 14 h. llego a Portomarín , después de atravesar un puente bastante alto
sobre el embalse del río Miño, éste embalse cubrió el primitivo pueblo y parece
ser que lo único que se salvó fue la iglesia fortaleza, que la trasladaron
piedra a piedra al nuevo emplazamiento del pueblo, el resto del pueblo es nuevo.
Iglesia Portomarin
Me dirígo al albergue, pero éste está en obras y se utiliza provisionalmente un
colegio que hay al lado, pero con las mínimas condiciones higiénicas, me tuve
que ir a duchar al polideportivo municipal. Curiosamente me
encuentro en la plaza a la chica de Jaén , que hacia dos días dejé en Vega de
Valcacer, parece que hizo una tremenda remontada para llegar aquí.
25/09/2003
Hacia las 6.30 h., desayuno y tengo
que tomar una decisión, ante la imposibilidad de llegar a Santiago, ya que se
me acaba el tiempo de que disponía, y después de caminar 110 kilómetros, decido
saltarme las dos últimas etapas, y tomo un autobús que me lleva a
Lugo. Después de estar dos horas en la estación de
autobuses, vuelvo a tomar otro que me lleva hasta Labacolla. Desde allí
camino hasta el Monte Do Gozo, llamado así porque es la primera vez que el
peregrino divisa a Santiago, en donde existe un enorme albergue, último
antes de llegar a la meta, éste está formado por pabellones donde están
los dormitorios, calles y una gran plaza, con todos los servicios.
26/09/2003
Por la mañana llego a Santiago, después de visitar la
Catedral y darle el abrazo protocolario al Santo y visitar la cripta,
me llego a la oficina del peregrino, donde me dan la Compostela, después
de haber acreditado que caminé más de 100 kilómetros.
Más
tarde busco un autobús que me lleve de vuelta a Ponferrada, éste autobús da una
vuelta enorme antes, me lleva hasta La Coruña, y luego a Lugo, haciéndome un
buen recorrido panorámico de Galicia. Desde el autobús veo el camino por
el puerto de O Cebreiro, recordando la enorme subida que había superado.
Una vez llegué a Ponferrada, volví al albergue a recoger el coche, e inicié la
vuelta a casa, llegando bastante tarde.
Esta primera experiencia del camino,
me servirá para la próxima vez no cometer los mismos errores en cuanto a peso
de la mochila, y no ceñirme a unos horarios y distancias
premeditadas. Espero poder hacer el camino completo desde
Roncesvalles, en etapas según el número de días de que disponga, pero es una
experiencia única y recomendable de hacer.
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